miércoles, 22 de febrero de 2012

"El tiempo entre costuras", de María Dueñas


Una sorpresa. Una muestra magnífica de cómo se puede construir una buena historia a partir de una reconstrucción razonablemente fidedigna de un período histórico reciente. Me ha gustado mucho, tanto la ambientación como la escritura. Me ha recordado en algún momento al  "Díme quién soy" de Julia Navarro, del que ya hablé en su día. Pero, pese a la presencia de algunos pocos elementos menos creíbles, resulta infinitamente más verosímil que aquella, tal vez precisamente porque no pretende abarcar toda la postguerra europea sino tan sólo un breve período de la guerra y la inmediata postguerra española, vista además desde una perspectiva poco frecuente.

"La joven modista Sira Quiroga abandona el Madrid convulso de los meses previos al alzamiento arrastrada por el amor desbocado hacia un hombre a quien apenas conoce. Con él se instala en Tánger, una ciudad exótica y vibrante donde todo puede suceder. Incluso la traición.

Sola, desubicada y cargada de deudas ajenas, Sira se traslada accidentalmente a Tetuán, capital del Protectorado Español en Marruecos. Espoleada por la necesidad de salir a flote, con argucias inconfesables y gracias a la ayuda de nuevas amistades de reputación un tanto dudosa, forjará una nueva identidad y logrará poner en marcha un selecto taller de costura en el que atenderá a clientas de orígenes lejanos y presentes insospechados.

A partir de entonces, con la contienda española recién terminada y los ecos de la guerra europea resonando en la distancia, el destino de Sira queda ligado al de un puñado de carismáticos personajes --Rosalinda Fox, Juan Luis Beigbeder, Alan Hillgarth-- que la empujarán hacia un inesperado compromiso en el que las artes de su oficio ocultarán algo mucho más arriesgado."
 
Lo mejor del libro, sin duda, la mezcla perfectamente realizada de personajes reales y ficticios, que van encajando una historia creíble y muy entretenida. Y todo ello, combinado con una buena prosa, ágil y precisa, que te arrastra rápidamente por la novela. Creo que podemos esperar bastante en el futuro de María Dueñas.
 
Dejo un enlace a la página oficial del libro, en el que se puede encontrar bastante material sobre los lugares en que transcurre la historia y sobre los personajes que la protagonizan, y también, algunos de los diseños que juegan un papel importante en la historia. Vale la pena darse un corto paseo por allí, porque a diferencia de otras páginas, aporta materiales complementarios al propio libro. Un ejemplo a seguir.
 
http://eltiempoentrecosturas.blogspot.com/

domingo, 19 de febrero de 2012

"El topo" de John Le Carré




“El señor George Smiley, a diferencia de Jim Prideaux, no era hombre naturalmente equipado para circular bajo la lluvia, y menos aún en plena noche. En realidad, bien pudiéramos decir que era la versión definitiva de aquel prototipo del que Bill Roach era sólo el proyecto. Bajo, regordete y, en el mejor de los casos, de media edad, tenía la apariencia de uno de esos mansos londinenses que no heredarán la tierra. Tenía cortas las piernas, su aire al andar podía ser cualquier cosa salvo ágil, y su traje que era caro, le sentaba mal y estaba extremadamente mojado. Su abrigo, que ofrecía ciertos matices de viudedad, era de ese tejido negro y blando que parece ideado ex profeso para retener la lluvia. O bien las mangas eran excesivamente largas o bien los brazos eran demasiado cortos, por cuanto, al igual que le ocurría a Roach cuando iba con su impermeable, poco faltaba para que las bocamangas ocultaran los dedos. Por vanidad no usaba sombrero, por cuanto creía, con todo fundamento, que los sombreros le daban aire ridículo. «Pareces un huevo duro», observó su bella esposa, poco antes de abandonarlo por última vez, y, tal como solía ocurrir, esta frase crítica fue certera. En consecuencia, la lluvia había formado gruesas y persistentes gotas en los gruesos cristales de las gafas, obligando al señor George Smiley a bajar y echar hacia atrás, alternativamente, la cabeza, mientras avanzaba por la acera junto a las ennegrecidas arcadas de la Estación Victoria. Avanzaba hacia el Oeste, hacia el refugio de Chelsea, en donde vivía. Por razones desconocidas, su paso era un tanto inseguro, y si Jim Prideaux hubiera surgido de las sombras para preguntarle si acaso no tenía amigos que le transportaran en automóvil, el señor George Smiley hubiera contestado, seguramente, que prefería ir en taxi.”


He releído estos días "El topo", o mejor en su versión original , "Tinker, Taylor, Soldier, Spy". Y no he visto aún la película. De hecho no estoy seguro de querer verla. Me he reencontrado con el mejor Le Carré, un maestro en todos los sentidos. La novela es, tal como la recordaba, una obra perfecta donde todas las piezas van encajando poco a poco. Simplemente perfecta.

Me ha resultado impresionante, con la distancia, reconstruir el ambiente de la guerra fría y el verdadero alcance de la misma. La cantidad de violencia, tanto explícita como soterrada, que la acompañó. Tal vez con el tiempo, todos le dimos más importancia al adjetivo, fría, sin recordar que lo importante era el sustantivo, guerra. Le Carré nos lo recuerda con su habitual sutileza y elegancia.

Además, la novela es una enorme galería de personajes inolvidables, empezando por supuesto por Smiley, pero siguiendo por el propio Karla, el director del espionaje soviético, que se convertirá en su obsesión en las siguientes entregas. Pero también gente como Jim Prideaux, agente herido en Checoslovaquia y cuya historia da pié a toda la novela. O el resto de los personajes del Circus.

Para quien no la conozca, "El topo" cuenta la historia de la investigación que George Smiley, prematuramente retirado, tiene que realizar para desenmascarar al traidor que se ha infiltrado en los niveles mas altos del Circus, la cúpula del servicio secreto inglés. La novela está lejanamente inspirada en hechos reales, dado que efectivamente, el MI6 fue infiltrado por lo que se llamó "Los cinco de Cambridge" (Kim Philby, Anthony Blunt, Donald Maclean, Guy Burgess y John Cairncross), reclutados por el NKVD, futuro KGB, en el Trinity College de la Universidad de Cambridge.

Y en cuanto a la película, por los fragmentos que he visto tengo la sensación de que no mejora la serie que en su día realizó la BBC, con Sir Alec Guinnes en el papel de Smiley, pero parece una muy digna adaptación.








Trailer de la serie de 1979


 


Trailer de la película, con subtítulos en español.

viernes, 17 de febrero de 2012

"Sé lo que estás pensando", de John Verdon



Siempre me acerco a los best-sellers con un sentimiento contradictorio. Por un lado, prevención, ya que me da miedo que se trate de simples productos de marketing. Por otro lado, con curiosidad, porque tiendo a pensar que si tienen tanto éxito es que algo tendrán. Y el resultado de leerlos es también muchas veces contradictorio. Por un lado, reconozco que algo tenían, pero por otro, casi siempre llego a la conclusión de que no era para tanto.

El libro de Verdon es un caso típico:

"Un hombre recibe una carta que le urge a pensar en un número, cualquiera. Cuando abre el pequeño sobre que acompaña al texto, siguiendo las instrucciones que figuran en la propia carta, se da cuenta de que el número allí escrito es exactamente en el que había pensado. David Gurney, un policía que después de 25 años de servicio se ha retirado al norte del Estado de Nueva York con su esposa, se verá involucrado en el caso cuando un conocido, el que ha recibido la carta, le pide ayuda para encontrar a su autor con urgencia. Pero lo que en principio parecía poco más que un chantaje se ha acabado convirtiendo en un caso de asesinato que además guarda relación con otros sucedidos en el pasado. Gurney deberá desentrañar el misterio de cómo este criminal parece capaz de leer la mente de sus víctimas en primer lugar, para poder llegar a establecer el patrón que le permita atraparlo."

Es decir, un planteamiento atractivo que te pica la curiosidad, aunque sólo sea para saber cual es el truco del autor, si se inclinará hacia lo paranormal o si hablamos de mate-mágicas.

A partir de ahí, un desarrollo cuando menos correcto. Pero el final es algo forzado y no demasiado bien resuelto. Tiene ecos de clásicos del cine (me tengo que morder la lengua para no dar pistas), pero solo ecos. Y sobre todo, la sensación de que lo mejor de los trucos es desconocerlos, porque cuando los descubres, pierden interés.

En conclusión, un libro entretenido, que se lee con voracidad para ver qué pasa y cual es la explicación de todo lo que ocurre, pero que se puede olvidar igual de aprisa.

 

martes, 14 de febrero de 2012

"Estudio en escarlata", de Arthur Conan Doyle



Entre que llevo una temporada algo retro y que me ha gustado mucho la nueva serie de televisión de la BBC sobre "Sherlock Holmes" (magníficos Benedict Cumberbatch y Martin Freeman), me he leído de una tacada la obra inicial de la saga, o mejor del cánon holmesiano, que he descubierto que los seguidores del detective hablan en esos términos del conjunto de la obra original de Conan Doyle sobre Holmes, para distinguirla de otras adaptaciones posteriores.

El resultado ha sido interesante. Como en otras ocasiones ya he contado al hablar de "Drácula" o "Frankestein", a veces te encuentras con que conoces tanto la historia que crees haberla leído, hasta que la lees. Sí que recuerdo haber leído hace mucho tiempo otras historias de Holmes, seguro por ejemplo que "El perro de los Baskerville", o algunos cuentos. Pero el "Estudio en escarlata" no lo había leído. Seguro. Entre otras cosas, porque contiene una parte ubicada en el lejano Oeste, con una crítica durísima hacia los mormones, en la que no aparecen para nada nuestros protagonistas, que creo que no hubiera olvidado.

Insisto una vez más en que vale la pena leer las fuentes originales de muchos de los textos que forman parte aparente de nuestra cultura. Están llenos de sorpresas.

En cuanto a las aventuras de Holmes y Watson, se incorporan al plan infinito. Como comentaba un compañero hace unos días, a pequeñas dosis, como Agatha Christie, que lo poco gusta, lo mucho puede cansar.

Cito a Holmes según las memorias de Watson:

"De no haber sido por usted, quizá yo no habría ido, con lo cual me habría perdido el mejor tema de estudio con que hasta ahora he tropezado: un estudio en escarlata, ¿eh? ¿Por qué no hemos de emplear un poco el argot artístico? Nos encontramos con el hilo rojo del asesinato enzarzado en la madeja incolora de la vida, y nuestro deber consiste en desenmarañarlo, aislarlo y poner a la vista hasta la última pulgada."  





domingo, 12 de febrero de 2012

"Matrimonio de sabuesos", de Agatha Christie



Un Agatha Christie de vez en cuando. Sin sobrecargas, que agotaría. En este caso, y siguiendo el orden cronológico, "Matrimonio de sabuesos" o "Partners in crime" (1929) en la versión original. La autora hace un intento por resucitar a la pareja de Tommy y Tupence Beresford que nos presentó en "El misterioso Señor Brown (The secret adversary)". Pero creo que ella misma se cansa de ellos, porque en el último minuto los retira definitivamente. Entretenida pero poco más. Es un conjunto de relatos cortos bastante variados, publicados previamente en distintos magazines.

Casi que lo cuentan ellos:

"—En conjuntorespondió Tuppence—, no lo hemos hecho del todo mal. El otro día hice un resumen de todas nuestras ac­tividades. Hemos resuelto cuatro misteriosos casos de asesinato, apresado una banda de falsificadores y otra de contrabandistas.

En total, dos bandas. Esto de «bandas» suena muy bien. ¿No te parece?                      -

Un caso de robo de alhajasprosiguió Tuppence ha­ciendo uso, en el recuento, de sus dedos—, dos casos de muerte violenta, un caso de desaparición de una dama que trataba me­ramente de reducir sus voluminosas formas, otro de protección de una joven desamparada, una coartada destruida y (¿por qué no reconocerlo?) también un espantoso fracaso. El resultado, como promedio, es altamente satisfactorio. Hay que reconocer, pues, que somos verdaderamente inteligentes."

Creo que hizo bien en retirarlos.







sábado, 11 de febrero de 2012

"Cuentos del libro de la noche", de José María Merino



De vez en cuando vuelvo a Jose María Merino, escritor de raíces leonesas, aunque por circunstancias familiares naciera en La Coruña en 1941. Me gusta como escribe, y sobre todo me gustan sus microrrelatos, que en algunas ocasiones son verdaderas obras maestras concentradas en pocas líneas. Ha publicado hace poco su última obra, "El libro de las horas contadas", y con ese motivo, mientras decidía si lo compraba o no, volví a mi biblioteca y releí en un rato, en un breve y agradable rato, estos "Cuentos del libro de la noche" que me gustaron mucho en su día y que me han vuelto a dejar con buen sabor de boca.

Así presenta el libro el autor:

"En el libro de la noche nuestras páginas están en blanco, escribió Chuan Tzu, el inventor o transmisor del cuento. Y es que en las páginas en blanco del libro de la noche las palabras pueden borrarse continuamente para escribir otras, lo que no sucede con las páginas del libro del día, donde lo escrito suele permanecer inalterable demasiado tiempo. Aquí reúno 85 cuentos de las páginas de mi particular libro de la noche, soñados o pensados al hilo del sueño. Todos son breves, porque el espacio nocturno de la imaginación está hecho de iluminaciones, de súbitos centelleos."

Y de muestra apenas un botón:

"El efecto iceberg (ensayo)

En el último segundo, el enorme trasatlántico consiguió esquivar el iceberg y todos los pasajeros llegaron a su destino. El estudio, profundo y meticuloso, analiza el papel que jugó cada uno de ellos en la sociedad a partir de su llegada, en los distintos aspectos y en relación con sus diferentes oficios y profesiones. La tesis del apasionante ensayo es que la actividad personal y social de aquel conjunto de personas ha sido decisiva para que los Estados Unidos, y en consecuencia el mundo entero, hayan llegado a atravesar el período de paz, solidaridad y equilibrio en todos los órdenes que estamos viviendo más de noventa años después. Los autores aseguran que si el Titanic se hubiera hundido aquella noche, la actualidad sería menos apacible y placentera."


jueves, 9 de febrero de 2012

"Noticias de la noche", de Petros Márkaris


Segunda novela que leo de la serie del comisario Jaritos, y primera de la serie en orden cronológico. Publicada por primera vez en 1995 y editada en España en el 2000. Nos encontramos con un comisario algo menos perfilado que en el libro anterior. En ese sentido, creo que la serie va mejorando con el tiempo y refleja bien la evolución griega. Hay que pensar que la edición original de "El accionista mayoritario" es de 2006 y que se notan los once años transcurridos, tanto en los personajes como en el país. En ese sentido, por ejemplo, nos encontramos con un comisario bastante más machista que en las entregas posteriores.

"Poco después del asesinato de un matrimonio de inmigrantes albaneses, un hombre, también de origen albanés, se confiesa autor del crimen. El caso, en apariencia cerrado, se desvela mucho más sórdido y complejo cuando una periodista especializada en sucesos, Yanna Karayorgui, aparece asesinada. Kostas Jaritos, comisario de la policía ateniense, es el encargado de la investigación. Genuino antihéroe de novela negra, Jaritos recurrirá a su intuición, cinismo y experiencia para desentrañar una trama de comercio clandestino, muy turbio, en el que están en juego intereses económicos de importantes organizaciones griegas y albanesas."

Como ya dije en la reseña anterior, Márkaris es todo un descubrimiento y voy a seguir con él en las próximas semanas, entre otras cosas, porque necesito entender lo que está pasando en ese país, que a este paso acabará afectándonos a todos. 



 

martes, 7 de febrero de 2012

"El interior del bosque", de Eugenio Fuentes



Esta es la primera novela que leo de Eugenio Fuentes. Había oído hablar de varias de sus novelas, en particular de "Contrarreloj", y casi siempre bien. Y puedo decir que no me ha defraudado. "El interior del bosque" es un buen relato, a la altura de bastante novela extranjera.

Eugenio Fuentes es un escritor extremeño, nacido en 1958 en Montehermoso, provincia de Cáceres. Sin duda alguna, su tierra extremeña es uno de los principales protagonistas de esta novela.

"En la reserva natural de Paternóster muere una mañana, salvajemente asesinada, la joven y bella pintora madrileña Gloria García Carvajal. Para esclarecer los motivos de tan horrible asesinato, el abogado Marcos Anglada, prometido de Gloria, contrata al detective privado Ricardo Cupido. Poco después aparece el cadáver de una excursionista adolescente asesinada de la misma manera y en el mismo lugar. En sus pesquisas, Cupido topará con una variopinta galería de personajes: desde un antiguo profesor de Gloria, de cuya ruptura matrimonial ella es la causa, hasta doña Victoria, que lucha para que le sean devueltas unas tierras. Pero un casual descubrimiento suscitará en Cupido de repente una terrible sospecha."

Me han gustado sobre todo los capítulos que transcurren en el bosque, que captan perfectamente los temores y terrores que asociamos a la oscuridad y a la noche. Aunque creo que aún podía haberle sacado más partido. De hecho, la resolución de la historia es demasiado urbana. Pero en cualquier caso, estamos ante una buena novela y  ante un buen autor, al que habrá que volver de vez en cuando.