Hoy se nos ha ido José Antonio Labordeta. Y con él se nos muere a todos un poco de nuestras vidas y de nuestro corazón.
Descanse en paz en su tierra de Aragón
"Ya ves, que vamos avanzando, cumpliendo este camino. No lo sé, ya ves.
Ya ves, que vamos recordando, creciendo hacia el ocaso. No lo sé, ya ves.
Ya ves, qué pálidas palabras se pierden en la noche sin hallar solución.
Ya ves, que hemos ido surgiendo de inciertas y duras voces de desesperación.
Recuérdame, como un árbol batido, como un pájaro herido, como un hombre sin más.
Recuérdame, como un verano ido, como un lobo cansino, como un hombre sin más.
Ya ves, que fuimos agrietando los muros mantenidos. No lo sé, ya ves.
Ya ves, que estamos añorando unos niños perdidos. No lo sé, ya ves.
Ya ves, qué voces diferentes se cruzan en el alba buscando la verdad.
Ya ves, que fuimos puente herido, de abrazos detenidos, por ver la libertad.
Recuérdame, como un árbol batido, como un pájaro herido, como un hombre sin más.
Recuérdame, como un verano ido, como un lobo cansino, como un hombre sin más."
3 comentarios:
No conocía estos versos, ni sé si los cantó alguna vez pero son una buena manera de recordar a Labordeta.
Celebro la coincidencia, lamento el motivo.
Un saludo
Jose Ignacio: Coincido con tus palabras. A todos nos ha afectado la muerte de un hombre bueno.
alestedemadrid: Los versos corresponden a una vieja canción del poeta, "Recuérdame".
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